Las más grandes experiencias en mi vida las he tenido a partir de un ACEPTO, de un SI. Y estas experiencias han marcado mis pasos, me han permitido madurar y crecer. Muchas veces tropecé y caí, pero me levanté, pues había dicho SI y no podía dejar las cosas a medias, «compromiso es compromiso» y se lo debe de hacer.
El ACEPTO incluye riesgos, rumbos desconocidos, miedo, etc., pero, esa es la idea, lanzarse.
Caminando con jóvenes y con algunos adultos, muchas veces haciendo una invitación a «algo», de un 10% escuché a un 9% que me dijo NO, o en algún caso excepcional de ese 9% quien me dijo SI al final no cumplió, lo dejó, ya no volvió, desapareció. Y ese 1% que dijo SI es muy poquitito, o que dicen ustedes?
Veo, escucho, siento, que hay más respuestas de un NO a un SI. Muchas excusas para no asumir un compromiso o cuando se falla: no puedo, no podré, dígale a otra persona, es que trabajo, tengo miedo fallarle, lo voy a pensar, aún soy joven, ya soy mayor, no quiero, en otra ocasión... etc. Qué pasó?
No se si hoy en día muchas generaciones están creciendo con bastantes miedos, puede ser por el vacío que muchos viven frente a su experiencia de familia, entendiendo que es ahí donde van ganando la fortaleza de papá y mamá para afrontar la vida tomando decisiones, donde un SI y un NO las escucharon y vieron de ellos. Hoy ya no existe esa «familia», la realidad me muestra bastantes divorcios, procesos familiares sobre asistencia familiar, violencia, hijos que crecen solos o solo con un padre o el hermano o algún familiar... o sea, hay un vacío que crea un miedo profundo.
Algo debemos hacer ¿No les parece?
Si estamos comprometidos con la vida, algo debemos hacer y ya!!!
#RubenAlejoConde
www.rubenalejoconde.blogspot.com
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