Recuerdo aquella Eucaristía en la que en su Aniversario Sacerdotal 70, Padre Vittorio estando en el Altar, se puso a agradecer por su ser sacerdote en voz muy alta, de frente al Sagrario (tengo guardado aún la grabación), donde algunas de sus palabras fueron «te agradezco por haberme regalado el sacerdocio, si volviera a nacer mil veces volvería a ser sacerdote tuyo, te agradezco por todas las misiones a las que me mandaste. Gracias Padre por traerme a esta familia, donde cada Scalabriniano creció y vive en mi...».
Aquella ocasión fue la última en la que vi al Padrecito Italiano, retornaría a su última misión en su país, pues su caminar ya era dificultoso, pero siempre alegre, siempre insistiendo «no dejes de orar».
Hoy, un sacerdote Santo más en mis memorias, recuerdos que me transportan a orar por él, y recordar sus palabras y entrega. Gracias Padre
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